lunes, 8 de febrero de 2021

 

                                                    La gripe española

      La vida te da más disgustos que satisfacciones y, por si fuera poco,  además del mal vivir, la escasez de trabajo y la miseria por la que pasaba nuestro país, se declaró una pandemia de la gripe en 1918, también conocida como gripe española. Fue una pandemia causada por un brote de virus de la gripe tipo A, subtipo H1N1.

      Recibió el nombre de gripe española porque la pandemia ocupo una mayor atención de la prensa en España que en resto de Europa, ya que no estaba involucrada en la guerra y por tanto no se censuró la información sobre la enfermedad. Aunque el origen del virus se acepta que fue en Estado Unidos, en uno de los campamentos militares establecidos en Kansas, al comienzo de la I Guerra Mundial, donde se registró el primer caso. Mató entre 20 y 40 millones de persona. 

    El fin del contagio no fue hasta 1920.

     Si la guerra se cobró 20 millones de vidas, las víctimas de esta gripe, pese a ser más  del doble, no suele recordarse en los libros de historia...


                              La Luz eléctrica pública en Sierra de Yeguas

      Como ya anunciaba en las páginas anteriores, entre 1892 y 1912 se instalaba la luz eléctrica en la zona de Antequera. Tuvieron que pasar cinco años más  para que llegara el tan deseado y necesario proyecto del fluido eléctrico a nuestro pueblo.

     En de Sierra de Yeguas, once de enero de 1917, el alcalde  D. Cristóbal Mora Muñoz, constataba y firmaba contrato de arrendamiento de la luz pública para nuestro pueblo Sierra de Yeguas con la empresa eléctrica de D. Francisco Gallardo Guerrero, arrendatario de la fábrica productora de aquel, instalada en Campillos, y a la vez con instalación transformadora de corriente aquí establecida, lo que se entiende que en este caso se está dentro de la recepción de subasta y con curso determinada.

     Transcribo aquí parte del contrato, ya que se compones de 25 puntos; así que voy a referirme a los más importantes:

 

1º. El contrato para el servicio del alumbrado público de esta Villa se llevará a cabo por el periodo de tiempo de seis años que terminará el treinta y uno de diciembre de 1922.

2º. El contratista hará por su cuenta las instalaciones que el alumbrado público precise, siendo también de su cargo el material que en ello emplee.

3º. Las lámparas para el alumbrado público se colocarán en los sitios que determine el seños alcalde.

4º . El Ayuntamiento queda obligado a dar toda clase de facilidades al contratista para la instalación de las lámparas que sean necesaria, al objeto de evitar entorpecimiento y perjuicio.

5º. El contratista percibirá dos mil cuatrocientas pesetas por cada un año del alumbrado público de esta población, consistente en ochenta y seis lámparas.

 

                         Por suministro de fluido ---------- Pesetas ------- 1400·00

                         Por arriendo de la instalación ----      -------     900·00

 

       Ya con la luz eléctrica instalada Sierra de Yeguas, se daba un paso de gigante en el progreso.

      Por otro lado, el 3 de marzo de 1917, y siguiendo con el plan general de arreglo de la vía pública, aparece el siguiente escrito que transcribo:

 Vista y examinada por el Ayuntamiento las relaciones de los jornales devengados durante el mes de abril, con motivo de la obra de reparación y afirmado de las calles Plazuela, Harina, y travesía de esta ( c/ Villavicencio a la de Cardenal Espínola) hoy día C/ la Cruz, a cargo del maestro de obra José Torres Llavero, donde por unanimidad se acuerda aprobarlas por sus totales importes de ciento treinta y ocho y otra de ciento diez y ciento tres pesetas, respectivamente, con cargo al crédito al presupuesto en ejercicio actual.

     Por su parte, los labradores, también hacían sus reivindicaciones, y con todo derecho se quejaban del mal estado de los caminos de circunvalación del pueblo, que para el próximo verano debería está arreglado, ya que los carros cargados de gavilla les era a veces difícil hacer circular con la gravante del peligro de poder tener un accidente. Así pues, el concejal de agricultura se hacía cargo de la peticiones para que se cumplieran lo antes posible.

 

 

 

 

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