Construcción del camino de Pedrera
Sesión ordinaria de 19 de agosto de 1918
En el año 1914 se construía un camino hasta la estación del vecino pueblo de Pedrera (Sevilla) para poder viajar por ferrocarril hasta la ciudad de Sevilla; cuatro años más tardes hubo un nuevo proyecto para ejecutar:
En sesión ordinaria del 19 de agosto 1918, el señor alcalde D. Cristóbal Mora Muñoz expuso que debido a la solicitud que se hizo en su día a Obras Públicas de construir un camino desde Sierra de Yeguas a la Estación de Pedrera para poder viajar a Sevilla, la máxima autoridad había resuelto y aprobado favorablemente, por valor de treinta y cinco mil pesetas, con cargo a la subvención y anticipo concedido con el fin de facilitar la pronta iniciación de los trabajos. Por su parte los propietarios de los terrenos que habrían de ocupar el camino estuvieron todos dispuestos a ceder la parte de sus terrenos que pudieran ser afectados por las obras. La relación de los propietarios de la localidad es la siguiente: D. Francisco Carbajal Rengel, D. José Mª Aguilar Gálvez, D. Francisco Sánchez Prados, D. Francisco José Gallardo García, D. Francisco Ruiz Pozo, D. Pedro Solís Gozálvez, y Doña Ángeles Solís Gozálvez. Estos dos últimos son los más afectados, que son los dueños de los cortijos Rejano y Cañada Hermosa.
Se acordó así, tras breve deliberación, autorizar al señor alcalde para que de manera oficial requiera a dichos señores la cesión de los terrenos que haya de ocupar el respetivo camino, levantando acta del resultado que ofrezca, y que en caso de ser favorable se remita a la Jefatura de Obras Públicas de la provincia a los efectos oportunos. También decidió la corporación autorizar igualmente al señor alcalde para que procure concretar la construcción del camino de referencia en la parte que afecta al término de esta villa, como medio de facilitar la realización de las obras en las condiciones que su proyecto aprobado demandaba.
Sesión de 14 de septiembre de 1922
Camino de Pedrera: Por disposición del Sr. alcalde D. Francisco Fernández Ruz, el Sr. secretario daba lectura a oficio del
Sr. ingeniero jefe de Obras Públicas de la provincia, en el que se transcribe
procedente de la dirección General comunicando el acuerdo
aprobatorio del acta de recepción definitiva de las obras del camino vecinal de
esta villa a la estación del ferrocarril de Pedrera; enterado de ello el
Ayuntamiento de Sierra de Yeguas decidió constase en acta su satisfacción por el feliz término de
tan importante mejora para los intereses de la población.
Como pueden comprobar fueron cuatro años lo que duró la ejecución de dicho camino.
Hago un paréntesis aquí, por la proximidad de fechas, para dejar constancia de otro acontecimiento que tuvo lugar y favoreció la vida de los serranos: el reloj de la torre de la iglesia: Durante la Dictadura de Primo de Rivera, y siendo alcalde de Sierra de Yeguas D. Francisco Arias Jiménez, se colocó el reloj de la torre de la iglesia en el año 1927, y costeado por el Ayuntamiento. Así lo contaba por entonces el señor alcalde. Transcribo el bello texto por lo histórico que tiene:
Con la autorización de la comisión
municipal permanente, según acuerdo de la misma adoptado en la sesión ordinaria
celebrada el día cinco del mes actual, y ante la necesidad urgente e
intensamente sentida de sustituir el antiquísimos reloj instalado en la torre de
la iglesia parroquial, cuyo irregular funcionamiento es notorio, por otro que
regule normalmente la vida local con sus distintos toques, especialmente
en el que concierne al desenvolvimiento de las operaciones agrícolas, sujetas
adecuadamente a horarios fijo, había practicado las necesarias gestiones para
conocer los precios y condiciones de venta de aquellas máquinas, y obtenido
como resultado que la casa Roses Hermanos, establecida en Valencia, ofrece las
mayores ventajas y facilidad de pago, por lo que al hablar con representación
de la misma se comprometió, en principio, a instalar el reloj número nueve de
su catálogo, con toques de horas y medidas, repetidas, y esfera de cristal de un
metro veinte centímetros de diámetro, con todos sus accesorios; entre esto, una
campana de doscientos kilos, tipo afrancesado, por el precio total de seis mil
doscientas cincuenta pesetas, a pagar en cuatro plazos: el primero, de dos mil
pesetas a los tres meses de instalado el reloj, y los tres restantes, a razón de
mil cuatrocientas dieciséis pesetas cada uno, en el mes de agosto, de los
años 1928, 1929 y 1930.
Enterado el ayuntamiento de lo manifestado por el señor alcalde, y estimando una necesidad de carácter urgente e inaplazable la sustitución del actual reloj de la torre, así como que las condiciones bajo las cuales se compromete la casa Roses Hermanos a instalar el que ha sido descrito resultaban muy ventajosas, sobre todo por las facilidades de pago, quedó aprobada finalmente la instalación del reloj de la torre de la iglesia de Sierra de Yeguas.
Días después, informado el concejo de que
la comisión municipal permanente designó para el cargo de dar cuerda al reloj público recientemente instalado
en la torre a D. Guillermo Pérez Sánchez, en
sustitución de D. Antonio Farelo Llavero, se acordaba dicho nombramiento fundado en la reconocida capacidad del apreciado para la misión que le había sido
encomendada.
Reloj de la torre de la iglesia de Sierra de Yeguas.
Portada del libro Nostalgia Serrana de Antonio Solís González
...Continuaremos con la carretera de la Roda de Andalucía en la próxima entrada.
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